viernes, 23 de septiembre de 2011

Otra vez en fuera de juego

En el momento de la vida solo me queda hacer lo mismo que Buffon, rezar, pero no se a quien ni como se hace, porque lo hice a tantos dioses a tantos santos y tantos mitos que se me acabó el pensar que alguien puede ayudarme.

Pese a intentar sacar adelante mi equipo no puedo hacerlo, me cuesta sacar el balón controlado desde el área, no soy capaz de ver la jugada antes que surja como hacia antes, no puedo administrar el tiempo de retención del cuero porque me pitan falta, pierdo el tiempo cuando mi equipo pierde, ¿porque? como decía Mou, ¿porqué hago tantas tonterías en estos partidos? cada partido de la vida es importante, cada jugada, parada, remate, rechace...

Soy como ese portero que se mete un gol en propia meta y luego le echa la culpa a los defensores por miedo a las represarais del míster.

Todo lo que pido al cielo es que me ilumine cuando la pelota se acerca, que no me tiemblen las manos, que no me falle la voz de mando, que sepa dirigir el encuentro cuando el míster no puede por cansancio, o cualquier otro tipo de malestar.

Quiero ser el portero que el míster fichó hace 7 años y 7 días, aunque juege con el 16, por favor míster no me rechace ni me apartes del equipo, porque aún tengo mucho que aportar.

La vida es igual que el futbol que por muchas ganas que le pongas al final tu pierdes 5-0 intentando jugar bien.